Poco tiempo hubo en Boca Juniors para celebrar el triunfo 2-1 contra Cruzeiro en el partido de ida de cuartos de final de la Copa Libertadores.
Este jueves se confirmó que el arquero Esteban Andrada, quien terminó el juego con un fractura en la mandíbula, tendrá que ser operado y pasará varias semanas, incluso meses, lejos de las canchas.
Esta fue el terrible choque que sufrió el portero con el atacante rival:
“Un jugador será culpable de juego brusco grave si emplea fuerza excesiva o brutalidad contra un rival cuando disputa el balón en juego”.
— Lucas Beltramo (@LucasBeltramo) September 20, 2018
¿Se aplica acá? Para debatir. Dedé baja la cabeza como un toro xq queda lejos de la ⚽️. Si Andrada noquea rival c/los puños, penal ¿y roja? pic.twitter.com/XBvb5NOrQP
La polémica vino cuando el árbitro expulsó a Dedé tras revisar el VAR, en el que quedaba claro que el jugador no tenía intención de agredir al arquero y la jugada parecía más bien fortuita.
En todo caso, ahora la preocupación es para Boca, que perderá a su arquero titular por al menos un mes y cuando viene un calendario muy difícil, en el que aparece el clásico contra River Plate este domingo, el partido contra Gimnasia por la Copa de Argentina el 27 de septiembre y la misma vuelta contra Cruzeiro, que será en dos semanas, además de un duelo con Racing y otro contra Rosario por la Liga en el próximo mes de octubre.
Agustín Rossi ocupará la posición, un desafío muy difícil pues Andrada es uno de los hombres más eficientes de Boca en la actual temporada.