James Rodríguez ilusionó con su regreso a la Selección Colombia pero una lesión volvió a sacarlo de carrera. Dejaba la concentración unas horas antes del amistoso contra Perú y se extrañó mucho.
Sin él, Colombia perdió la brújula y aunque venció 1-0 a Perú en una jugada discutida, la realidad es que pasó casi todo el juego sin que se cayera una sola idea en la tarea creativa.
En la primera media hora del partido contra Perú, no tuvo Colombia un conductor. Solo Cuadrado se animó a juntarse con Muriel y nada más. Moreno, Díaz y los demás se perdieron en la intrascendencia.
Terminó el primer tiempo y Colombia era un equipo plano en la creación. Cuadrado no tenía regularidad, Díaz era un espectador de lujo y Muriel inclinaba el ataque por derecha pero sin precisión. Morelos no recibió ni un pase.
Un poco de claridad se ganó en el medio para el segundo tiempo, con la salida de Yairo y la llegada de Matheus, quien se acordó por fin de Morelos. No resolvía Colombia el lío del referente creativo, pero algo era algo…
Llegaron Steven Mendoza y Alzate y Roger Martínez pero se diluyeron las ideas y las asociaciones. Intentar la salida de Arias por derecha fue el único camino. Poco tiempo tuvieron los nuevos y poco peso los veteranos.
Sin James no solo se pierde el referente de ataque sino la brújula, las transiciones son erráticas y hay más rechazo que pase. Con el tiempo llegan la desesperación y la impotencia. Colombia es trivial e inofensiva sin su 10.
¿Te quedaste con ganas de más?