Desde que Reinaldo Rueda llegó a la dirección de la selección de Chile, no ha podido contar con Claudio Bravo en sus convocatorias, pues el referente del arco austral había tenido discusiones con los dirigentes de la Federación chilena y después aseguró que tenía unas vacaciones pendientes con su familia para no estar en las fechas de amistosos previas al Mundial de Rusia 2018. Y justo cuando las cosas parecían enfriarse, y Bravo se acercaba de a poco al proceso de Rueda, el guardameta se lesionó en una práctica con el Manchester City, su club en Inglaterra, rompiéndose el tendón de Aquiles y quedando descartado por lo que queda del año. Así, la tarea del DT colombiano ahora será afianzar un arquero en la Roja.
Por fortuna para ‘Rei’, ante la ausencia de Bravo ya había examinado el presente de varios candidatos al arco de la selección austral en los amistosos que ha dirigido. Johnny Herrera (Suecia y Dinamarca), Gabriel Arias (Serbia y Polonia) y Gonzalo Collao (Rumania), han sido los guardametas que ha probado Rueda.
Aunque Herrera es el de más experiencia (37 años), en Chile todos hablan de las buenas cifras de Gabriel Arias, un argentino nacionalizado chileno que pasó por Unión La Calera y que ahora defiende la portería de Racing de Avellaneda. Collao, por su parte, está en desventaja porque no le fue bien cuando tuvo la oportunidad.
En el panorama de Rueda también aparecen porteros como Cristopher Toselli, Brayan Cortés, Yerko Urra y Nelson Espinoza, quienes han sido parte del nuevo proceso de la selección chilena, pero no han tenido minutos de competencia.
Así, Reinaldo Rueda tendrá una tarea titánica para darle la responsabilidad del arco chileno a un hombre de confianza, que pueda suplir con creces al histórico Claudio Bravo, y que pueda llegar en gran nivel a la Copa América de 2019 y que sea posibilidad para las Eliminatorias a Catar 2022.